Cómo elegir tu vestido de novia (y no morir en el intento)
Podemos hablar por horas de cómo elegir tu vestido. Hablar de tendencias, de diseñadores, de siluetas, de colores. Pero entre tantas cosas, podrás -seguramente- perderte en el camino.
Hoy te daré una guía rápida con los pasos más importantes para elegir tu vestido de novia perfecto.
- Estudia marcas y tendencias. Esto te dará una perspectiva más amplia del mercado y te podrá ayudar a elegir un estilo más fácilmente.
- Indaga las tiendas locales. Haz un listado de las opciones para visitar en tu ciudad, elige las que más se acomoden a tus necesidades y separa las citas que desees. Trata de hacer un recorrido continuado, para así tener fresco en la memoria todas las opciones que te has medido. Un truquito que sirve mucho es tomarte fotos con los vestidos que te van gustando.
- Ten algunos referentes. Cada gusto es particular y único, por eso no todos los vestidos te van a gustar. Déjate guiar por tus gustos, ten en mente las siluetas que más te gustan para que cuando vayas a la tienda a tu cita de medición, ya tengas un pequeño camino recorrido y sea más fácil hacerte entender.
- Elabora un presupuesto. Así sabrás con qué cuentas para no desfasarte o desenfocarte. Generalmente todas las tiendas tienen varias líneas, por lo que probablemente encontrarás vestidos de todos los valores. Un rango de precios ayudará a que tanto tú como tu asesora se centren en lo que necesitas.
- La compañía para tu cita de medición es clave. Siempre queremos una opinión, pero a veces quienes nos acompañan, por más que nos amen o por más cercanía que tengamos, no son las personas más indicadas. Por tanto, trata de no llevar a muchas personas. Ten en cuenta que para gustos los colores, y entre más opiniones encontradas tengas de un mismo vestido, será más confuso para ti. Con un par de personas cercanas (mamá, hermana o mejor amiga) es más que suficiente. Ellas te darán opiniones de corazón.
- No siempre es lo que mami diga. Es tu gran día y mereces gusto en todo. Si te sientes bien con tu vestido y crees que es el indicado, ¡que te resbalen las opiniones! No por que sea un regalo, o por que no es del agrado de algunas personas, debes elegir el que no te gusta. Con amor, hazle ver a tus acompañantes que sus opiniones son muy importantes, pero que tú eres quien tomará la decisión final.
- No te quedes con el primero, pero no mires demasiados. La mayoría de las mujeres por naturaleza somos indecisas. Trata de tener varias opciones, medirte cuantos vestidos quieras; pero llegará un punto -con toda seguridad- que ya estarás saturada de vestidos y será mucho más difícil la elección. Todo en su justa medida. No por medirte todas las tiendas de la ciudad tomarás le mejor decisión.
- Déjate sorprender. Muchas veces, lo que en un principio no lo vemos tan interesante, puede que nos de una sorpresa (algunas historias de amor comienzan así). Por eso, deja que tu asesora te proponga y dale la oportunidad de medirte un par de diseños que no tienes en el radar. Así, o te reafirmas en tu gusto o te llevas una agradable enseñanza – y de una vez tu vestido-.
- Si te talla no es tu talla, como dice el dicho. Si el vestido no te convence por alguna razón, no has terminado con la búsqueda. Sabrás cuándo tienes tu vestido cuando brinques en un solo pie de la felicidad; antes no.
- Por más lindo que sea el vestido, debe ser coherente con la boda. No es lo mismo una boda de noche que de día; al aire libre, que en un salón; en un clima cálido o en un lugar frio. Déjate asesorar para que tu vestido no desentone con el resto de la celebración.
- ¡No lo pienses mucho! Cuando sepas que ya tienes tu vestido, haz la reserva. El que piensa pierde y seguramente cuando te decidas a llevarlo ya estará ocupado para la fecha de tu boda. Ten en cuenta que hay días del año que tienen más demanda que otros, por lo que debes asegurarte de llevar el vestido que quieres y no el que te tocó.
Bonus: Para guardar la tradición y como agüero, ¡no lo dejes ver de tu novio sino hasta el altar!
Con estos simples pero importantes datos, será mucho más fácil la elección de tu vestido y no estarás tomando decisiones que no te convengan. Ahora sí, ¡a disfrutar de la preparación de tu boda!
Redacción: Paula Alzate, Wedding Planner
Fotografía: Soul Historias de Boda @soul.historias
